Una sala blanca de una de las fábricas del mayor productor de chips del mundo. / Intel |
En la última edición de la conferencia anual de desarrolladores IDF13, celebrada el mes pasado en San Franciso, Brian Krzanich, el nuevo consejero delegado de Intel, presentó Quark, un minúsculo chip basado en su arquitectura de 22 nanómetros (nm). Este procesador está pensado para ir incorporado en prendas de vestir, futuras aplicaciones médicas, sensores y en lo que se ha denominado ‘internet de las cosas’.
Además de un avance, Quark es una muestra de la nueva estrategia de Intel de hacer que sus chips lleguen a ser ubicuos y puedan encontrarse en cualquier dispositivo, ya sean smartphones, tabletas, PC y los híbridos entre esas tecnologías, sin olvidar los desarrollos futuristas que estén aún por llegar.
Haswell, nombre en código de los chips de cuarta generación de Intel Core, se basa en la arquitectura de 22 nm. / Intel Free Press |
Este gigante, con una cuota del 80% del mercado mundial del PC a través de la plataforma Wintel (Windows + Intel), tiene ahora que hacerse un hueco en el mercado de dispositivos móviles dominado hasta el momento por firmas como Qualqomm y Nvidia, que han andado más ágiles a la hora de ver las nuevas oportunidades.
Para afrontar esta batalla, Intel cuenta con una maquinaria de investigación y desarrollo más potente que las de sus competidores. La firma californiana invierte 10.000 millones de dólares (unos 7.400 millones de euros) al año en I+D y cuenta con una red de 30 Intel Labs, repartidos por todo el mundo, en los que trabajan más de 1.000 investigadores.
FUENTE: Agencia SINC